¿Quién era Ibn Gabirol?
Probablemente haya sido el más grande neoplatónico de la tradición filosófica medieval árabe, y posiblemente haya sido también el más grande poeta medieval hebreo.
Hijo de una familia cordobesa que escapó hacia Málaga en el año 1013, a causa de las revueltas que dieron fin al califato cordobés —por lo que Ibn `Ezra e Ibn Zakkuto lo denominan al-qurtubi, es decir, «el cordobés», aunque él mismo se proclama en varios de sus poemas acrósticos ha-malaquí, «el malagueño»—. Nacido en 1020 -o 1021 según las fuentes- su estancia en la judería malacitana se limita a la niñez, y pronto, seguramente debido a nuevas revueltas producidas tras la muerte de Almanzor, se traslada junto a su padre a Zaragoza,6donde recibiría su educación. Allí, su precoz genio poético le valió la protección del mecenas Yekuti`el ben Isaac, visir judío del rey Mundir II de la taifa de Zaragoza. Ibn Gabirol se refiere a Yequtiel ben Isaac como «príncipe», «nací de príncipes y soberanos» y «señor de los señores», y a él le dedica buena parte de sus más excelsos poemas. He aquí un fragmento elegíaco a la muerte de su maestro Yequtiel ben Ishaq:
Fíjate en el sol del ocaso, rojo,
como revestido de un velo de púrpura:
va desvelando los costados del norte y el sur,
mientras cubre de escarlata el poniente;
abandona la tierra desnuda
buscando en la sombra de la noche cobijo;
entonces el cielo se oscurece, como si
se cubriera de luto por la muerte de Yequtiel.
En 1039, tras los tumultos ocurridos durante el golpe de estado de Abd Allah ibn Hakam contra Mundir II, que derrocó a la dinastía de los tuyibíes, Yekutiel fue asesinado y, tras dedicarle las más hermosas de sus elegías (un fragmento de la cual reprodujimos arriba), Avicebrón dejó Zaragoza y marchó a Granada, en busca de otro protector en la persona del uno de los más notables y poderosos personajes de su época, Šemuel Ibn Nagrela, visir de Badis ibn Habus rey zirí de Granada. Fue preceptor de su hijo Yosef y, a pesar del origen común de sus familias —ambas eran cordobesas y emigradas a Málaga—, sus relaciones fueron conflictivas, llegando incluso al enfrentamiento personal, debido, tanto a la rivalidad poética como al particular carácter de nuestro personaje, del que dijo Ibn `Ezra: «Su genio indómito le llevó a injuriar a los grandes y a llenarlos de ofensas, sin excusarles sus defectos». Tras residir unos años en Granada optó de nuevo por volver a Zaragoza.
Ibn Zakkuto nos trasmite una romántica leyenda de su muerte en Valencia, a manos de un vate musulmán celoso de sus poemas, y de como tras ser inhumado bajo una higuera, esta dio sus más dulces frutos.
Obra
Autor de numerosos panegíricos y elegías, pero también cultivó la sátira y el autoelogio, que eran géneros habituales entonces entre los poetas árabes, pero no entre los hebreos. Como otros grandes poetas de su época (entre los que se cuentan grandes rabinos y eruditos de la época, líderes de la comunidad como Semuel ibn Nagrella, Moses ibn Ezra o Yehudah Halevi), Ibn Gabirol cultivó la poesía homoerótica, género que era habitual tanto entre los poetas hispanohebreos del «Siglo de Oro» de la literatura hispanohebrea como entre sus coetáneos musulmanes.
También escribió abundante poesía religiosa, entre la que destaca el Keter Malkut (Corona del reino), un largo poema de tendencias místicas que supone una síntesis entre las creencias tradicionales judías y la filosofía neoplatónica, todo ello adornado por un gran conocimiento de la astronomía árabe.
Compuso, además, dos célebres tratados en lengua árabe. El primero es de carácter filosófico, el segundo se ocupa de la ética y la moral y es de orientación ascética.
Para saber más de Ibn Gabirol consulte aquí.